Hay veces que uno ve fotos que son simplemente fantásticas. Y pensamos que no habría forma de conseguir una foto así ni que estuviésemos un año con la cámara en la mano.
Para mi el tema del humo constituyó un reto pues me tuve que documentar muchísimo de cómo debería hacerse, el manejo de la luz es fundamental en esto y hacer las fotos en un lugar en donde el ambiente esté controlado.
No quería hacer la típica foto de humo sin ningún elemento humano, o hacerla de alguien fumando, que a mi parecer daría un mensaje negativo, tampoco quería hacer algo tan abstracto que al final sería más de lo mismo que se ve en internet cuando googoleas fotos de humo, solo un hilo de humo con formas caprichosas y nada más, claro, no estoy diciendo que el buen humo en sí no puede ser un tema interesante.
En mi foto el tema no es el humo en sí, es simplemente una herramienta utilizada para crear una fotografía inusual: lo que pretendí fue crear imágenes usando humo, con esto en mente ya podía hacer lo que quisiera para manipular el humo tanto como fuera necesario.
BUEN HUMO
No hay una forma “correcta” de fotografiar humo, siempre se puede hacer humo de varias formas, pero los secretos clave para fotografiar humo son: usar en manual la camara, luz de flashes usandolos lateralmente en relacion a la fuente de humo y utilizar humo gris. ¿Cómo? ¿Eso funciona? Bueno, te explico: Para conseguir el mejor humo para trabajar, utilicé incienso, en varas, en piedras y en trozitos con forma piramidal, sí probe con todos y sí, a veces suelo ser un tanto obsesivo con los detalles. De todos estos, los conitos fueron los que mejor me funcionaron para esta foto y se pueden conseguir en la mayoría de los mercados del país o en los almacenes chinos o hindúes que todos vemos en la mayoría de centros comerciales.
Una vez que tenés el humo, el resto es sólo congelar el movimiento y conseguir la iluminación correcta, el factor técnico crítico es iluminar el humo adecuadamente para que resalte sobre el fondo.
ILUMINACIÓN Y EXPOSICIÓN
La mejor manera de obtener fotos de humo iluminados “claramente” es utilizar un entorno limpio con iluminación controlable, en mi caso utilicé un rincón de mi habitación donde a mi modelo le puse una tela negra encima para que solo se vieran sus manos, la hice a obscuras. Coloque un flash a 1.90mts de altura, en un trípode de esos que se usan para las sombrillas de estudio y dentro de una bolsa negra de papel dejando una abertura dirigido sobre las manos (no tengo snoot), con esto conseguí suficiente luz para congelar el movimiento del humo en el aire y lo puse dentro de la bolsa negra de papel, para asegurarme que ninguna luz diera directamente al lente de la cámara (esto causaría reflejos o efectos similares) ni al fondo oscuro (porque eso aumentaría el detalle del fondo, o sea la modelo, cosa que no quería). También le puse una linterna de potente luz led directamente en el suelo y apuntando para arriba, de esa manera las manos quedaron iluminadas de una forma directa y única.
Cuando estás sacando las fotos, es más sencillo dejar que el humo se eleve por su cuenta, en lugar de intentar manipular la varita o en mi caso el conito de incienso, que por cierto lo puse en una tapita dentro del hueco que se formó en las palmas de las manos, de vez en cuando moví el aire para turbar el hilo parejo, lo que provocaba que se hicieran formas interesantes y a disparar fotos en modo manual con mucha luz y una apertura pequeña (y, por lo tanto, una mayor profundidad de campo).
Con la menor apertura necesaria para capturar el humo apropiadamente, obviamente se pierde luz. Esto es un problema porque, para poder congelar el movimiento permanente del humo, se necesita una rápida velocidad de obturador. En términos prácticos, significa 1/160 o más rápido (hasta 1/200 en mi caso para que el flash se sincronice bien). Simultáneamente, no se puede reducir el valor ISO(100 a 200) de la cámara tampoco porque los detalles del humo se arruinarían con la cantidad de ruido. No hace falta aclarar que el necesitar valores de ISO pequeños, aperturas pequeñas y alta velocidad de obturación significa que necesitamos grandes cantidades de luz. Tuve que configurar la potencia y apertura del flash para que la parte más brillante del humo esté casi blanca. Si sobreexpones la foto significará pérdida de detalles, lo que se ve artificial. Subexponer la foto, en cambio, hará más difícil diferenciar el humo del fondo.
Por cierto para que todo esto funcione use disparadores inalámbricos conectados al flash y la cámara, se sincronizan automáticamente, estos se consiguen en amazon por menos de $40.00 el par.
Una vez que estás tomando fotos, vale la pena recordar que necesitas tener la habitación bien ventilada. No porque el humo te haga daño (que probablemente lo haga si respiras demasiado, o te entra en los ojos, etc.) sino porque, a medida que el aire se llena de la niebla de humo disipado, las fotos tendrán menos luz, contraste y definición – la verdad cuando estamos en el trance fotográfico, no nos importa la salud ¡solo las fotos!
MANIPULACIÓN DIGITAL
Tomé muchas fotos y a todas les encontraba formas que me recordaban algo, un árbol, una fruta, un pez, una sirena, y de repente ví esta en la que se veía como que fuera un genio saliendo de la lámpara mágica y de inmediato me vino a la mente el nombre que le podría poner a la foto y esta fue la que escogí.
Una vez seleccionada la foto, la cuestión fue más sencilla, solo recorté la foto, la convertí en blanco y negro en photoshop usando un plug in de Nik Software manipulando contraste y brillo para asegurarme que el fondo quedara completamente negro y le dí ese virado sutíl en sepia que me gusta usar mucho en mis fotos en blanco y negro y allí quedo la foto, espero no te haya aburrido con tanto detalle.